jueves, 22 de noviembre de 2007

lee de forest





LEE DE FOREST (1873 – 1961)
Físico e inventor norteamericano. Inventó la válvula electrónica amplificadora tríodo, que cambió- al mundo con el desarrollo de la electrónica. Fue pionero de la radiodifusión en los Estados- Unidos- de Norteamérica.

El físico e inventor norteamericano Lee de Forest nació en Council Bluff, Iowa, el 26 de agosto de 1873. Todavía siendo muy pequeño la familia se mudó para el estado de Alabama, donde su padre, ministro de iglesia protestante, dirigiría una pequeña escuela para negros. Fue él mismo quien intervino directamente en la formación educacional de Lee con la intención de despertarle también la vocación religiosa.
Contrariamente a los deseos del padre, Lee prefería la ciencia, hacia la cual sentía gran atracción, sintiéndose fascinado por las maquinarias y la información que obtenía de los últimos avances tecnológicos de finales del siglo 19. Aislado de las relaciones normales de amistad que tenían otros jóvenes que vivían en las ciudades, dedicó mucho tiempo a la lectura. Uno de sus pasatiempos favoritos desde los 13 años fue dedicar el tiempo libre a inventar aparatos mecánicos y eléctricos.En 1893 obtuvo una beca en la Escuela Científica Sheffield, de la Universidad de Yale, una de las pocas instituciones que en esa época ofrecía una alta formación científica. En 1899 consiguió continuar el doctorado en física, debido a su interés por la electricidad, específicamente el estudio de la propagación de las ondas electromagnéticas iniciado años antes por el físico alemán Heinrich Rudolf Hertz y continuado por el también físico italiano Guglielmo Marconi. La tesis doctoral de Lee de Forest “Reflexión de las ondas hertzianas a partir de las puntas de dos alambres paralelos” fue, probablemente, la primera en los Estados Unidos que trató ese tema, estrechamente vinculado a lo que con el tiempo sería la radio.Su primer trabajo después de graduado lo realizó en la Compañía Western Electric, en Chicago. Allí trabajó en el departamento de dinamos, después pasó a la sección de telefonía y, por último, en el laboratorio experimental. En esa época, en su horario extra laboral, se dedicó a desarrollar un detector electrolítico de ondas hertzianas, que no tuvo mucho éxito.La mayor parte de su vida Lee de Forest la dedicó a trabajar como inventor independiente. Generaba una idea tras otra, pero su falta habilidad para los negocios le impidió siempre sacarles mayor provecho desde el punto de vista económico. Tales eran sus fracasos en ese campo que hacia 1906 la primera empresa que creó se había convertido en insolvente. Su falta de visión hizo que en dos ocasiones sus propios socios comerciales lo engañaran.No obstante las adversidades sufridas, en 1907 patentó una válvula electrónica tríodo, a la que llamó “Audión”, basaba en la válvula diodo inventada tres años antes por el ingeniero eléctrico inglés Sir John Ambrose Fleming.
La modificación introducida por Lee de Forest consistía en intercalar entre los dos electrodos (cátodo y ánodo) de la válvula diodo de Fleming un tercer electrodo, denominado grilla o rejilla de control, con el cual la válvula era capaz de amplificar pequeñas señales de corriente alterna. La sensibilidad a la recepción de señales inalámbricas resultó ser superior en la válvula tríodo en comparación con las posibilidades de los dispositivos electrolíticos y de carborundo o carborundum que se utilizaban en aquella época. Hasta ese momento muchos inventores habían tratado de mejorar la válvula diodo de Fleming sin llegar a conseguirlo.
Válvula amplificadora triodo inventada por De Forest

samuel morse



SAMUEL MORSE (1791 – 1872)
Inventor y pintor estadounidense. Inventó el telégrafo y el código que lleva su nombre.
El inventor y pintor estadounidense Samuel Finley Breese Morse, nació el 27 de abril de 1791 en Charlestown, Massachussets. Era hijo de un pastor calvinista y destacado geógrafo, que trató siempre que su hijo recibiera una educación esmerada. Inició los estudios en la Academia Phillips, de Adover y los terminó en 1810, en la hoy Universidad de Yale.
En la universidad, Morse nunca demostró mucho interés por las clases, excepto por la pintura y la electricidad, lo que causó no pocas veces la desesperación de sus padres y profesores. Morse decidió dedicarse a la pintura, aunque también le interesaba mantenerse al tanto de los últimos descubrimientos y experimentos relacionados con la electricidad.Después de graduarse en Yale trabajó unos meses como oficinista en una editorial de Boston hasta que logró convencer a los padres para que le permitieran ir a Londres a estudiar bellas artes, ciudad donde se convertiría en retratista y escultor de éxito.A su regreso a los Estados Unidos en 1825, se estableció en la ciudad de New York, donde se ganó la vida como retratista, convirtiéndose en uno de los pintores más importantes y respetado del país. Fue, además, fundador y primer presidente de la Academia Nacional de Dibujo y profesor de arte y diseño de la Universidad de la Ciudad de New York.Tiempo después Morse regresó a Europa y poco a poco le fue prestando más atención a la química y la electricidad, especialmente en lo relacionado con los descubrimientos realizados por el francés André-Marie Ampère acerca de la corriente eléctrica y el magnetismo.De regreso a Estados Unidos en 1832, después de escuchar una conversación en el barco en que viajaba acerca del invento del electroimán, concibió la idea de crear un telégrafo eléctrico que sirviera para enviar mensajes a largas distancias a través de un cable. La idea no era nueva, pero hasta ese momento nadie la había materializado.En 1835 tenía construido el primer prototipo de telégrafo y en 1838 había creado el código que permitiría cursar los mensajes, más conocido después como alfabeto o código Morse, compuesto de puntos y rayas.Durante los siguientes cinco años Morse se dedicó a mostrar su telégrafo a hombres de negocio y al Comité del Congreso, con la esperanza de recaudar fondos que le permitieran realizar las pruebas de transmisión de los mensajes a larga distancia entre dos ciudades por medio de un cable. Finalmente, en 1843 el Congreso de los Estados Unidos le asignó 30 mil dólares para construir una línea telegráfica de 60 kilómetros que uniría a las ciudades de Baltimore y Washington. En mayo de 1844 la primera línea telegráfica electromagnética estaba lista para la prueba.
El 24 de agosto de 1844 Morse envió desde el Capitolio de Washington a Baltimore el primer mensaje telegráfico del mundo, una cita bíblica que ponía de manifiesto su propio asombro de que Dios lo hubiera escogido a él para dar a conocer de esa forma a la humanidad el uso práctico de la electricidad. El mensaje transmitido era el siguiente: “What Hath God Wrought?” (What had God brought?) o ¿Qué nos ha traído Dios? Después de doce años de lucha para que reconocieran su esfuerzo, Morse se convertía así en un héroe de la nación norteamericana.
Llave telegráfica Morsevista desde arriba
El segundo cable telegráfico se extendió entre las ciudades de Washington y New Jersey. En un inició las primeras líneas telegráficas enlazaron solamente estaciones ferroviarias, después se utilizaron para uso oficial de los gobiernos y, por último, para el envío de mensajes a particulares. Una vez demostrada en la práctica la posibilidad de enviar mensajes por ese medio a grandes distancias, comenzó de inmediato el rápido enlace entre diferentes ciudades de los Estados Unidos.No obstante el éxito obtenido con su invento, en los primeros tiempos Morse se vio obligado a luchar contra el oscurantismo de la época que achacaba a su invento la culpa de todos los males que acechaban a los ciudadanos. Tuvo incluso que luchar duramente para que se le reconociera el derecho de patente de invención del telégrafo. Debido a que el sistema de transmisión de mensajes por cables estaba siendo desarrollado simultáneamente por científicos de otros países, se vio envuelto en largos litigios ante los tribunales hasta que, en 1854, la Suprema Corte de los Estados Unidos lo reconoció como único inventor del telégrafo.Una parte de la fortuna que le proporcionó el telégrafo, Morse la dedicó a subvencionar obras filantrópicas, aportando fondos a instituciones educativas como Vassar College, la Universidad de Yale, asociaciones misioneras y de caridad, así como a artistas pobres.Samuel Morse murió de pulmonía en la ciudad de New York, el 2 de abril de 1872, poco antes de cumplir 81 años de edad. Ese día los puntos y las rayas enviados a través de los cables de las instalaciones telegráficas transmitieron la noticia que el inventor del telégrafo había fallecido. El sistema de transmisión de mensajes telegráficos por cables de forma inmediata y a largas distancias, ideado por Morse, así como el código que él mismo creó, es el más sencillo y práctico que ha empleado la humanidad durante muchos años. A pesar de la aparición mucho después del télex, el fax y, por último, el correo electrónico, aún hoy se continúa empleando, aunque en menor escala que antes, el código de telegrafía inventado por Samuel Morse.